No más escapar.

Si querés podemos compartir los asientos, no hay problema. Compartir el momento.

Esperar.

Esperar y observar. Mirar. Estar atentos. sin pensar. no. no pensemos. es al pedo pensar. Ufff lo que cuesta no pensar, como si no lo supiéramos... ¿y? Ya está. Es cuestión de callar, respirar. Oír la respiración. controlarla. Tratar de no perder el ritmo y toda esa cháchara. 

Eso sí, si hay un llamado ir. sin peros. 

Sin temor.

Sin temor.

Sin miedo.

No más escapar.

No voy a escapar más de mí.

No quiero escapar más de mí.

Ya está.

Vamos a afrontar.

No estás solo.

No estoy solo.

En serio.

Vamos a afrontar todo esto.

De los destinos.

Del destino.

Del dolor.

Cómo no hacerlo con todo el amor que hay por acá, por allá. Por todos lados.

Tanto amor en el todo y en la nada más nada, más infima. En el infito, amor, cursilería, no hacen falta curso de amor a distancia. No. Ya está. Ya es hora de arrancar. Aprendimos. Lo mínimo, indispensable. Alcanza. Sobra para arrancar.

Ya está.

Ya no hay tiempo para esperar.

No podemos esperar más.

Si algo sabés. Si algo querés. Si algo aceptaste. Ya está. Ese algo es mucho. Es mucho y sí, a la vez es tan chiquito, tan chiquito que sigue siendo enorme todo lo que te falta descubrir. Descubrir de vos. De todos. De vos.


Basta. 

No te lastimes más.